NELSON MANDELA

NOMBRE: Nelson Mandela.

ÉPOCA: Una en la que en Sudáfrica ‘negro’ y ‘persona’ eran términos contrapuestos.

CURRÍCULUM: Nelson Mandela es uno de los grandes personajes del siglo XX y, curiosamente, no lo es por haber descerrajado tal o cual guerra o por haber invadido tal o cual país como lo son la mayoría. Mandela, como Gandhi, Luther King y pocos más, es historia por exactamente todo lo contrario: por su lucha por las libertades y contra el racismo vomitivo que imperaba en su país, Sudáfrica, materializado en el llamado “apartheid”, que consistía básicamente en que en ese país los blancos eran ciudadanos de primera y los negros, evidentemente mayoría, no llegaban ni a ciudadanos.
Mandela comenzó a luchar contra eso en primer lugar en su faceta de abogado y después como político. Y, bueno, digamos que no lo hizo del todo mal, porque, tras muchas vicisitudes como su paso por prisión, consiguió llegar a ser presidente de Sudáfrica y a abolir aquel nauseabundo sistema, uniendo a todo el país bajo su figura. Y la historia nos enseña que normalmente eso no suele ser bueno ni saludable, pero en este caso sí lo fue porque, entre otras cosas, a Mandela no le dio por perpetuarse en el poder ni por liquidar a la oposición como otros que habían obrado antes ese fenómeno en otros lugares del mundo.
Mandela no acabó con el racismo, cierto, porque para eso hay que cambiar las cabezas enfermas de cierta gente, pero le pegó una hostia histórica a los racistas que en su vida olvidarán. ¡Zas, en toda la boca!

MOMENTAZOS:
–Nobel.
A Mandela le dieron el Nobel de la Paz junto a De Klerk, el líder sudafricano blanco con el que pactó para hacer de Sudáfrica un país diferente. Cierto es que ese galardón tiene la credibilidad que tiene después de que lo haya recibido gente como Kissinger, pero, no, en este caso estaba más que justificado. Aparte, a Mandela le dieron tropecientos mil premios más, lo que, dicen, le obligó a mudarse de casa porque en la antigua ya no le cabían tantos galardones. El precio del éxito, ya se sabe.
–Cárcel. Como os he comentado, Nelson Mandela pasó gran parte de su vida en prisión. Veintisiete años, concretamente, que se dice rápido pero que son muchos meses, días y horas como para estar encerrado a trabajos forzados. Pero su fama y su hegemonía como líder negro crecían cuanto más estaba en la cárcel, y es que los tiranos nunca han entendido que lo peor que pueden hacer es crear mártires. En todo caso, es encomiable que, después de eso, Mandela aún tuviera fuerzas para hacer lo que hizo y ganas para reconciliarse con según quien. Aunque por eso él pasará a la historia, incluso a la Infrahistoria, y de sus carceleros no se acordarán ni sus puñeteros padres, simplemente.
–Melón. Uno de los símbolos más grandes de la reconciliación en Sudáfrica vino a través del deporte, cuando Mandela apoyó a la selección de rugby, históricamente uno de los símbolos del apartheid, que acabó ganado el Mundial. Un emotivo gesto que ha dado lugar a libros y películas y que engrandeció la figura de Mandela, si que ésta necesitaba ser engrandecida. Y es que hay veces que un puñado de tipos corriendo detrás de un balón con forma de melón vale más que miles de soldados con armas, aunque haya gente a la que le cueste entenderlo.

EPÍLOGO: Un grande. DEP.

LeandroAguirre©2013

ÍNDICE DE LA INFRAHISTORIA

 

SECCIONES ACTIVAS

SECCIONES FINALIZADAS

OTROS