No sé qué pasaba con las niñeras de antaño, pero a todas les daba por ponerse a cantar inopinadamente a la menor ocasión. Bueno, quizás era cosa de las niñeras o quizás era cosa solo de Julie Andrews, que tanto en Mary Poppins como en Sonrisas y lágrimas (el original era The sound of music, que tampoco es tan complicado de traducir literalmente como para cambiarle el título así por la cara, creo) aterroriza a los niños cantando a la menor oportunidad.
Pero es que hay además en estas películas un añadido: los doblajes. Y es que, aunque ahora nos pueda parecer inaudito, antes los musicales se traducían y doblaban de arriba a abajo. Efectivamente: no solamente los diálogos, las canciones también. Y, claro, nos encontrábamos con casos tan delirantes como el siguiente, en el que la buena de Julie Andrews intenta enseñarle a los niños —cantando, por supuesto, aunque en este caso tiene sentido— cómo funciona eso de las notas musicales.

La cosa iba tal que así:

DON... es trato de varón (y Doña de mujer, cierto, pero Don no es ninguna nota musical)
RES... selvático animal (porque, como todo el mundo sabe, la vaca es un animal que se encuentra en la selva. E, insisto, Res no es ninguna nota musical)
MI... denota posesión (con acento sí, pero sin acento como es el caso, no)
FAR... es lejos en inglés (Impepinable, pero, siento ser pesado, Far tampoco es una nota)
SOL... ardiente esfera es (de esta no tengo nada que decir. Es cierto: el sol es una esfera ardiente. Cuando tienen razón se les da y ya está)
LA... al nombre es anterior (al nombre femenino, especifiquemos)
SI... asentimiento es (lo mismo que lo del Mi: es asentimiento si lleva tilde, y si no, pues no)
Y de nuevo viene el DO
DO-DO-DO

Resumiendo, que para los alumnos de Julie Andrews las notas musicales son: don, res, mí, far, sol, la y sí. Resumiendo más: menos el sol y el la, todas las demás están mal. Muy educativo, sí señor.
¿El argumento de la peli? Que Julie Andrews y el padre de los niños se enamoran, básicamente. Podría extenderme más, sí, pero no me apetece. Os lo puedo decir más alto, si queréis.